El Día Internacional de la No Violencia es una jornada que se celebra anualmente el 2 de octubre desde 2007, proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en ese mismo año.
Fue proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas, el 15 de junio de 2007, con el apoyo de 140 co-patrocinadores.
La iniciativa fue presentada por el Ministro de Estado de Relaciones Exteriores de la India, Anand Sharma, quien destacó la relevancia universal de la filosofía de Gandhi y su impacto en la promoción de una cultura de paz y no violencia.
La resolución subraya la importancia de difundir el mensaje de la No Violencia mediante la educación y la concienciación pública, reafirmando la vigencia del principio de No Violencia en la actualidad y su papel crucial en la construcción de una sociedad basada en la tolerancia y la comprensión.
El origen de la propuesta se remonta a enero de 2004, cuando la laureada Nobel iraní Shirin Ebadi, presentó la idea en el Foro Social Mundial en Bombai.
Este concepto atrajo el interés de líderes del Partidos del Congreso de India, culminando en una resolución en la Conferencia Satyagraha de enero de 2007 en Nueva Delhi, impulsada por Sonia Gandhi y Desmond Tutu, que instó a la ONU a adoptar esta idea.
Natación de Mahatma Gandhi
Mahatma Gandhi, nació el 2 de octubre de 1869, y fue uno de los personajes más relevantes del movimiento independentista hindú, con respecto al régimen colonialista del Imperio Británico.
Desde 1919 perteneció abiertamente al frente del movimiento nacionalista indio. Instauró métodos de lucha social novedosos como la huelga de hambre y en sus programas rechazaba la lucha armada y realizaba una predicación de la áhimsa (no violencia) como medio para resistir al dominio británico.
Defendía y promovía ampliamente la total fidelidad a los dictados de la conciencia, llegando incluso a la desobediencia civil si fuese necesario; además, bregó por el retorno a las viejas tradiciones hinduistas. Mantuvo correspondencia con León Tolstói, quien influyó en su concepto de resistencia No Violenta. Fue el inspirador de la marcha de la sal, una manifestación a través del país contra impuestos a los que estaba sujeto este producto.
Encarcelado en varias ocasiones, pronto se convirtió en un héroe nacional. En 1931 participó en la Conferencia de Londres, donde reclamó la independencia de la India. Se inclinó a favor de la derecha del partido del Congreso y tuvo conflictos con su discípulo Nehru, que representaba a la izquierda.
En 1942 Londres envió como intermediario a Richard Stafford Cripps para negociar con los nacionalistas, pero al no encontrarse una solución satisfactoria, estos radicalizaron sus posturas. Gandhi y su esposa Kasturba fueron privados de su libertad y puestos bajo arresto domiciliario en el Palacio del Aga Khan, donde ella murió en 1944, mientras él realizaba veintiún días de ayuno.
Su influencia moral sobre el desarrollo de las conversaciones que prepararon la independencia de la India fue considerable, pero la separación con Pakistán lo desalentó profundamente.
Una vez conseguida la independencia, Gandhi trató de reformar la sociedad india, empezando por integrar las castas más bajas (los shudras o ‘esclavos’, los parias o ‘intocables’ y los mlechas o ‘bárbaros’), y por desarrollar las zonas rurales.
Desaprobó los conflictos religiosos que siguieron a la independencia de la India, defendiendo a los musulmanes en el territorio indio, siendo asesinado por Nathuram Godse, un fanático integracionista hinduista, el 30 de enero de 1948 a la edad de 78 años. Sus cenizas fueron arrojadas al río Ganges.
Sobre economía política, pensaba que el capital no debería ser considerado más importante que el trabajo, ni que el trabajo debería ser considerado superior al capital, juzgando ambas ideas peligrosas; que, más bien, debería buscarse un equilibrio sano entre estos factores, siendo que ambos eran considerados igual de valiosos para el desarrollo material y la justicia. Fue un gran defensor del vegetarianismo y rechazaba cualquier forma de maltrato a los seres vivos.